-Mira que sabe mal tropezar dos veces, o doscientas, en la misma piedra. Es sabido que salvo las honrosas excepciones de Faulkner, Poe y algún otro los yankees no se merecen ni diez minutos.
-¿Y a cuento de qué viene eso?
-¿Cuento? Eso querría. Por lo menos no tendría más de mil páginas.
-Lo bueno si breve...
-Al final hasta comen perdices.
-¿Y al principio?
-Al principio, principio de todo pone en letras grandes "Libertad" y debajo Jonathan Franzen. Lo pongo claro por si te lo encuentras.
-Siempre se puede saltar.
ResponderEliminar¿saltar un pingüino?
ResponderEliminarlos pinguinossaltan
EliminarVosotras pobres criaturas, de página, yo de mundo.
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