Los pájaros de la cabeza le desordenaban las ideas. Los soltó y se le escaparon las ideas.
domingo, 14 de agosto de 2011
viernes, 5 de agosto de 2011
¡Estaba a punto de morir de inanición!
Con el verano, el pingüino se trasladó de residencia. Realmente estaba cansado, harto de tanto hielo y se olvidó del comedero ¿Por dónde diablos se metía la comida?
Cuando comprendió que no sólo de Sol se alimentan los pingüinos, se dedicó afanosamente a buscarse el sustento y ¡he aquí! que obtuvo grata recompensa a sus desvelos.
Hoy por hoy, el pingüino y con él su pluma, están salvados.
Cuando comprendió que no sólo de Sol se alimentan los pingüinos, se dedicó afanosamente a buscarse el sustento y ¡he aquí! que obtuvo grata recompensa a sus desvelos.
Hoy por hoy, el pingüino y con él su pluma, están salvados.
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